En nuestro afán por presentar temas curiosos -la rara vez que abandonamos la política- a nuestros escasos, pero selectos lectores, hemos dado con la lista de las, al parecer, 10 palabras más difíciles de traducir.
Al ser un préstamo tomado de una página norteamericana, es probable que a nuestra mentalidad algunas de ellas no suene tan extrañas, pero aún así, una vez traducido su significado, el resultado es bastante jugoso. Lean, lean...
Mamihlapinatapei
Del Yagan, la lengua indígena de la comarca de Tierra del Fuego en América del Sur. Esta palabra implica siempre una mirada sin palabras, pero significativa compartida por dos personas que tienen el deseo de iniciar algo, pero son reacios a empezar. (Vamos como cuando chica y chico -u otras posibles combinaciones, aunque esos suelen ser más descarados- les apetece marcha, pero nadie da el paso.)
Jayus
Desde Indonesia. Es un chiste tan malo y con tan poca gracia, que el que lo oye no puede dejar de reír. (Nos ha pasado a todos, ¿no?)
Prozvonit
En ambos Idioma checo y eslovaco, esta palabra significa llamar a un teléfono móvil sólo un ring, para que el otro nos devuelva la llamada, ya que el que llama no quiere o puede gastar dinero. (Te hago una perdida que no tengo saldo)
Kyoikumama
En japonés, esta palabra se refiere a una madre que empuja sin cesar a sus hijos hacia el éxito académico. (En castellano, conozco varios nombres propios que definen bien el caso. Y suelen conseguir el efecto contrario.)
Tartle
Un verbo que significa en escocés dudar al tiempo que estamos presentando a alguien por haber olvidado su nombre. (Hola, Juan mira esta es... ¿cómo coño se llamaba esta tía? Otra variante podría al despertar, la mañana siguiente: ¿Y cómo decías que te llamabas, nena?)
Iktsuarpok
En inuit o esquimal, significa salir a la calle para comprobar si alguien se acerca. (Oye, sal del igloo que me ha olido a foca fresca.)
Cafuné
Del portugués brasileño. Significa acariciar con ternura el cabello de alguien. (Pues sí, todos cafuneamos o hemos sido cafuneados alguna vez, que duda cabe...)
Torschlusspanik
Alemán: esta palabra significa literalmente "puerta de cierre automático de pánico" y se usa para describir el miedo de no aprovechar las posibilidades a medida que envejecemos. Esta palabra es más frecuentemente aplicada a las mujeres a las que ya les apura el "reloj biológico" para casarse y tener hijos. (Vamos, que se les pasa el arroz. Como a mi, aunque no soy mujer.)
Tingo
De la lengua de la Isla de Pascua, es el acto de tomar prestados los objetos que uno desea de la casa de un amigo de forma gradual hasta que nos hemos hecho con todos ellos. (Pues no conocía el vocablo, pero sí conozco casos de gente que te intenta tingar ¿o podríamos decir tangar?)
Ilunga
En el lenguaje llamado tshiluba en el sureste de la República Democrática del Congo, esta palabra ha sido elegida por numerosos traductores como palabra más intraducibles del mundo.Ilunga indica una persona que está dispuesta a perdonar cualquier abuso la primera vez que ocurre, a tolerarlo la segunda vez, pero ni perdonar, ni tolerar una tercera ofensa. (Vamos, cualquier discípulo de Cristo con dos dedos de frente: una mejilla, vale, la otra, en fin, pero a la tercera te crujo el alma.)
Y nada más. Haciendo un Jayus mientras espero decidirme ante el próximo Mamihlapinatapei y triunfar, porque ya tengo Torschlusspanik y el Cafuné -u lo otro- está muy bien, aunque, si estás cerca nos puedes hacer un Tartle, dado que las víctimas de las Kyoikumama somos más bien tímidos,
Intento ser Tshiluba, aunque tengo tendencia al Iktsuarpok, porque hay mucho cabrón suelto y, dado que la economía está como está (y por una vez en la vida no voy a decir de quien es la culpa), os haré Prozvonit. Y del Tingo, ya vale, que me estoy quedando sin libros...